Dolly Parton es una de las estrellas más queridas del planeta. Como cantante, actriz y filántropa, su figura es más grande que la vida misma; como esposa, mantuvo un velo de privacidad sobre su matrimonio con su difunto esposo Carl Dean, quien falleció en marzo de 2025 a los 82 años.
Parton y Dean se conocieron en Mar-a-Lago
El encuentro tuvo lugar en Mar-a-Lago, la exclusiva residencia y club privado del presidente estadounidense Donald Trump, en Palm Beach, Florida. En su publicación, Verástegui escribió:
“En Mar-a-Lago, conversando con Elon Musk. Vientos de libertad. Más detalles más adelante.”
El mensaje rápidamente acumuló más de 55 mil vistas, generando un intenso debate en redes sociales sobre el propósito y contenido de la reunión.
La publicación de Verástegui no pasó desapercibida. Mientras algunos seguidores elogiaron el encuentro y especularon sobre posibles colaboraciones futuras, otros mostraron escepticismo.
“No entiendo por qué creen que hablar con Elon les da superpoderes.”
“¡Muy bien! Elon sabe muy bien lo que pasa en México y no le gusta para nada… esperemos su apoyo.”
Estos comentarios reflejan la polarización que acompaña a figuras como Musk y Verástegui, especialmente cuando se vinculan con políticos de derecha como Donald Trump.
Eduardo Verástegui y el saludo nazi
Hace unas semanas, Verástegui protagonizó un momento controvertido al realizar un gesto que fue comparado con el saludo nazi durante su participación en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), evento que reúne a figuras de la extrema derecha estadounidense e internacional.
En su discurso, Verástegui expresó su apoyo al movimiento liderado por Donald Trump y Elon Musk. Al finalizar, extendió su brazo derecho de manera recta, un gesto que muchos analistas han relacionado con el saludo nazi utilizado en la Alemania de los años 30 y 40.
Elon Musk hizo un gesto similar
En noviembre del año pasado, Elon Musk también se vio envuelto en una polémica similar. Durante el desfile inaugural de Donald Trump, el CEO de Tesla realizó un gesto con el brazo que algunos interpretaron como un saludo nazi.
El gesto fue captado mientras Musk se encontraba entre otras figuras prominentes en el Capital One Arena, donde más de 20,000 seguidores de Trump se congregaron para celebrar su toma de posesión.
Durante el evento, Musk subió al escenario visiblemente entusiasmado, hizo gestos animados, gritó “¡Sí!” al micrófono y luego dio un breve mensaje. Fue en este momento cuando el gesto generó controversia debido a su similitud con el infame saludo asociado con la Alemania nazi.