La disputa legal entre Maribel Guardia y su exnuera, Imelda Tuñón, ha llegado a un punto crítico, lo que llevó a un juez a tomar medidas estrictas para evitar más enfrentamientos. Recientemente se llevó a cabo una audiencia en la que, según Marco Chacón, esposo de la actriz, se presentarían pruebas.

No obstante, al finalizar, ninguna de las partes ofreció declaraciones a la prensa, generando incertidumbre. Poco después, se supo que el silencio se debió a una orden del juez, quien les solicitó evitar confrontaciones en los medios.

Maribel Guardia e Imelda Tuñón podrían ser arrestadas por esta razón

Un documento judicial recientemente filtrado establece que ambas deben abstenerse de cualquier acto de molestia o violencia entre ellas o hacia el menor involucrado, con el riesgo de enfrentar sanciones económicas e incluso arresto.

El periodista Ernesto Buitrón informó en el programa de Maxine Woodside que una fuente le proporcionó el documento, en el cual se especifica que ni Maribel Guardia ni Imelda Tuñón pueden hacer declaraciones en redes sociales o medios de comunicación sobre el caso.

“Se requiere a la señora Imelda Andrea Garza y a la señora Maribel del Rocío Fernández García abstenerse de cualquier acto de molestia o violencia entre ellas y hacia el niño J.J.F.G. De no cumplir, se impondrá una multa inicial de seis mil pesos, la cual podría aumentar hasta derivar en un arresto de 36 horas en caso de reincidencia”.

IG @imetunon @maribelguardia. Ni Maribel Guardia ni Imelda Tuñón pueden hacer declaraciones
 

Según Buitrón, ambas aceptaron estas condiciones en la audiencia de la semana pasada, lo que implica que no podrán seguir haciendo declaraciones públicas sobre el conflicto legal.

Imelda Tuñón denuncia violencia vicaria

El pasado 8 de marzo, Imelda Tuñón participó en la marcha del 8M portando un paliacate naranja, símbolo de la lucha contra la violencia vicaria. En un breve encuentro con la prensa, su tía Addis Tuñón le realizó una entrevista, en la que expresó.

“Estoy aquí defendiendo mis derechos y alzando la voz por quienes no pueden hacerlo”.

Lo más llamativo de sus declaraciones fue que insinuó ser víctima de violencia vicaria por parte de Maribel Guardia y su esposo, aunque evitó mencionarlos directamente para no infringir las restricciones legales y no afectar el proceso de custodia del hijo de Julián Figueroa.